Aquí encontrarás un ambiente cálido y familiar, donde las niñas y niños aprenderán de forma divertida y rodeados de afecto, potenciando sus habilidades que les permitan explorar su entorno y sus propios intereses.
El lenguaje: puente hacia el mundo en la infancia
Trabajar con la infancia es adentrarse en un universo lleno de descubrimientos, donde cada palabra, gesto y sonido se convierten en herramientas para construir puentes hacia el mundo. El lenguaje no solo es un medio de comunicación; es el vehículo que les permite a los niños y niñas conectar con sus emociones, expresar sus pensamientos y descubrir todo lo que los rodea.
Desde el primer «mamá» o «papá» hasta la capacidad de narrar historias o resolver conflictos, el lenguaje se desarrolla como una habilidad esencial que da forma a sus experiencias. Pero su impacto no se limita a la expresión individual. A través del lenguaje, los niños sienten el amor de sus familias, forjan amistades, encuentran consuelo en las canciones y disfrutan de las historias que les enseñan valores y amplían su imaginación.
En nuestra escuela, creemos firmemente que cada momento es una oportunidad para nutrir y fortalecer estas habilidades. Las rutinas diarias se convierten en espacios ricos en comunicación, donde la risa, el aprendizaje y el cariño se entrelazan con palabras y gestos. Fomentamos un entorno en el que el lenguaje no solo es una herramienta, sino también una fuente de alegría, amor y conexión.
Camila Cisternas – Fonoaudióloga Escuela de Lenguaje Santa Leonor.
Estoy muy feliz porque este año, a pesar de la pandemia, mi niño estuvo en muy buenas manos, encontramos un jardín realmente fabuloso.
Los pocos días que mi hijo asistió presencialmente fue una experiencia única, mi hijo progresó un montón.
Me he sentido muy cómoda, en confianza y muy satisfecha.
Tenemos la gran bendición de haber educado a dos de nuestros tres hijos en esta maravillosa escuela.
Niños con valores y habilidades blandas de excelencia, capaces de pararse frente a cualquiera, con respeto, amabilidad y mucho amor.
Siempre hemos pensado que la escuela nos enseñó a todos, nos hizo más consiente, más empáticos y mejores personas.
Este es mi primer año como apoderada de la escuela y estoy muy agradecida de sus docentes porque, a pesar del distanciamiento, mi hijo ha seguido teniendo esa cercanía con las tías y sus compañeros por medio de las diferentes actividades pedagógicas.
Tienen un gran amor por enseñar y se preocupan por cada familia, dando apoyo y fortaleciendo a los más pequeños.
Aprendizaje Armónico y Feliz